El Seignanx es un territorio landés a las puertas del País Vasco: playas y bosques de pinos, estuario y Barthes de l’Adour, ciudades conectadas y pueblos más discretos, puerto industrial y polo aeronáutico… Un territorio alternativo e innovador, fuertemente comprometido con el Desarrollo Sostenible y la Economía Social y Solidaria.

 

MAR Y PLAYAS…

Aquí comienza el mayor cordón dunar de Europa. Entre Ondres y Tarnos, 8 kilómetros de playa permiten tanto las tranquilas siestas soleadas como los vivificantes baños en familia (la vigilancia está garantizada de mi junio a mi septiembre).

Aquellos que saben nadar pueden inscribirse en las escuelas de surf certificadas para aprender a deslizarse sobre olas necesariamente ideales: Estamos justo entre Hossegor y Biarritz, las 2 «capitales» del surf en Europa. Entre 2 castillos de arena, los más pequeños pueden tomar clases de natación en el club de playa. Ya sea para dormir, comer, jugar, leer, tomar el sol, bucear, surfear, caminar, correr, pescar (surf casting)

…VAMOS A LA PLAYA !

 

LA PINEDA LANDESA

El bosque de las Landas es el bosque cultivado más grande de Europa. Primero plantada para fijar el pantano, el hombre se dedicó a cuidarlo, explotarlo, cortarlo, replantarlo… El mobiliario, el papel o los productos elaborados a base de resina de pino son todos posibles usos.

Este espacio natural incomparable le ofrece sobre todo múltiples actividades como el senderismo: Solo o en familia; a pie, a caballo o en ruedas… Usted corre a través de pinos en un carril bici asfaltado que se practica tanto en bicicleta, como en skate o en patines. Forma parte de la mayor ruta ciclista europea: la Vélodyssée. Los caminantes y corredores le prefieren los senderos marcados bajo los pinos de Ondres o de Tarnos.

UNA VUELTA EN EL BOSQUE ?

 

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EL CAMPO : TIERRA DE TRADICIONES

El campo del Seignanx es una alternancia de colinas y valles salpicados de auténticos pequeños pueblos. Pinares, bosques de frondosas, campos de maíz, huertos, arroyos, parques… son paisajes accesibles gracias a los numerosos senderos señalizados que permiten descubrir una naturaleza respetada y cuidada. Se habla aquí de ruralidad, de autenticidad y de «tradición del buen vivir» donde la gastronomía es reina…

À TABLE !

 

En los Barthes del Adour o la reserva del pantano de Orx, la fauna y la flora silvestres se hacen más discretas: el sitio de Arremont (CPIE) o de la casa del pantano le permitirán conocer mejor estos ambientes húmedos y observar a sus habitantes, sean permanentes o estacionales (garzas, cigüeñas, grúas…).

PATRIMONIO  VASCO Y LANDESE

De castillos en casas burguesas, de iglesias fortificadas en caseríos típicos, es una arquitectura original que cuenta cómo los hombres y las mujeres vivían aquí. La «Ciudad de las Forjas» testimonia el desarrollo industrial conocido en Tarnos en el siglo XIX, el pasado obrero y sus luchas… Por último, cómo hablar de arquitectura sin evocar los frontones contra los que se lanza la pelota y que reinan en todos los poblados del Seignanx. También forman parte de la cultura local. Es un lugar de encuentro y encuentro que invita al descubrimiento de este deporte típico que compartimos con el País Vasco.

FESTIVALES Y ANIMACION

El Seignanx es ya manifestaciones estivales como las fiestas tradicionales de las ciudades y pueblos, las corridas de vacas landesas, las partidas de pelota vasca, los mercados, el descubrimiento del patrimonio, los espectáculos y conciertos… Fuera de temporada, el Festi’Mai recorre el Seignanx desde hace más de 20 años para dar a conocer a artistas independientes en las cuatro esquinas del territorio (circo, conciertos, teatro, humor…), mientras que Tarnos acoge el Jazz en marzo , Saint-Martin el Catach Festival…

Para las fiestas patronales, confíe en los voluntarios de los pueblos que le servirán los platos tradicionales del suroeste disfrutando del ambiente cálido que reúne regularmente a Gascons y vascos en torno a una mesa, una plaza o un frontón. Por último, la ubicación ideal del Seignanx permite asistir a los grandes eventos de las ciudades vecinas como las Ferias de Bayona (servicio de autobús, noche y día), las competiciones internacionales de Surf de Hossegor y Biarritz, sin olvidar los numerosos festivales circundantes.